Principios Bautistas
Conozca en resumen los principios que unen y proclaman los bautistas a nivel mundial.
Como iglesia Cristiana nos suscribimos a la rama histórica y denominacional de los Bautistas, presentes en todo el mundo. Somos miembros activos y rendimos cuenta de todas nuestras actividades a la Federación de Iglesias Bautistas Evangélicas de Colombia (FIBEC), denominación cristiana que tiene su origen en misioneros canadienses enviados por la Fellowship of Evangelical Baptist Churches of Canadá (FEBCC). La FIBEC ha sido reconocida por el estado colombiano como entidad religiosa desde 1997. La FEBCC tiene su oficina mundial en Toronto, Canadá, y sirve en más de 15 países del mundo tanto en la labor evangelizadora como en obra social y humanitaria. A continuación usted puede tener un resumen de los principios que unen y proclaman los bautistas a nivel mundial.
Principio Cristológico
Jesucristo es el Señor,
Él es la única cabeza y su vicario es el Espíritu Santo. “Sola Fe”, una fe Cristocentrica.
Principio Bíblico
Las Sagradas Escrituras son autoritativas e inefables: “Sola Escritura”, la Biblia es la única norma de fe y de conducta.
principio Teológico
Dios es soberano:
“Sola Gracia”, la seguridad eterna de salvación.
principio Eclesiástico
Una membresía regenerada (nacida de nuevo) creyentes bautizados por inmersión. La iglesia local como la expresión de la Iglesia universal, cada iglesia local es un cuerpo ¨completo¨ de Cristo
Principio Sociológico
Un orden democrático: El gobierno congregacional y la autonomía de la iglesia local.
Principio Espiritual
Principio Político
La separación de la iglesia y el Estado. No creemos en un Estado confesional. Nos sometemos a las autoridades civiles debidamente constituidas, pues ellas tienen autoridad delegada por Dios.
La libertad religiosa: Cada persona es libre, y se le debe respetar esa libertad, de tener el culto o religión que decida
Principio Misionero
La iglesia promueve el evangelismo personal y la empresa misionera.
Principio Ministerial
El sacerdocio universal de todos los cristianos. Cada creyente es un ministro responsable de ejercer sus dones espirituales.